Vuelo entre Luz y Sombra
Aves acuáticas, humedales y contaminación en el Golfo de Nicoya.
Esta exhibición temporal centra su atención en nuestros recursos naturales y lo que nosotros, los habitantes de Costa Rica, estamos haciendo para protegerlos y también para destruírlos.
Hace un llamado sobre la importancia de la conservación de los humedales y las aves que lo habitan y pretende contribuir para que las personas recapacitemos sobre el manejo de los desechos que producimos.
Está dirigida a los jóvenes entre 13 y 17 años, pero los adultos y los niños también pueden disfrutar de ella.
Cuenta con un audiovisual que utiliza la tecnología de la multi-imagen, con 6 proyectores de diapositivas que permiten un despliegue exclusivo de fotografías en 3 pantallas diferentes y con musicalización de fondo. Se complementa con un salón de exposición, en donde se desarrolla el tema de una forma plástica.
La exhibición es un verdadero vuelo entre luz y sombra, entre la belleza escénica y la vivaz fauna de los humedales, entre la amenaza de extinción y la contaminación que enviamos desde el Area Metropolitana hasta el Golfo de Nicoya.
Sobrevolando
el área
Humedales
Los Humedales son superficies cubiertas por agua dulce o salada, estancada o corriente, tienen un suelo muy húmedo, pueden ser permanentes o temporales y desde un punto de vista paisajístico se clasifican de la siguiente forma:
"
Naturales: ríos, manglares, lagunas, costas, estuarios, pantanos y
esteros
" Artificiales: embalses, canales y salinas
En estos ecosistemas acuáticos conviven vegetación, aves e insectos acuáticos; peces, crustáceos, reptiles y algunos mamíferos. Además, las tortugas los aprovechan para desovar. Las cadenas alimenticias que se desarrollan aquí, incluyen finalmente al ser humano.
Además de su valor ecológico, los humedales tienen un importante papel económico y social pues son fuente de agua dulce, electricidad, trabajo, transporte, recreación, alimento, ayudan a controlar la erosión y sirven de protección contra inundaciones.
Estos hábitats se pueden considerar centros vivos de investigación por su biodiversidad. Y por su impresionante belleza, también son muy atractivos para el turismo.
En Costa Rica tenemos más de 350 humedales, entre ellos el Golfo de Nicoya considerado de gran importancia para el país, por sus recursos de valor biológico, económico y turístico.
Aves acuáticas
Las aves acuáticas dependen del agua y los humedales durante toda su vida, o por temporadas. En estos ambientes acuáticos las aves se refugian , alimentan, reproducen y descansan. Para esto han adaptado sus plumas, picos, patas y algunas hasta su forma de volar.
Pelícanos, garzas, patos, gaviotas y cigüeñas forman parte de los 160 tipos de aves acuáticas que tenemos en Costa Rica.
Para nosotros es importante estudiarlas, porque se conoce que las enfermedades que ellas experimentan debido a la contaminación, pueden llegar a sufrirlas otros animales y también los seres humanos.
Estas
hermosas aves cada día levantan su vuelo hacia la luz, pero su vida
está en peligro por varios motivos:
La destrucción de su hábitat, principalmente
La contaminación
La cacería ilícita
La extinción o sobreexplotación de otras especies de su cadena
alimenticia.
En
Costa Rica ya hay varias especies de aves que vuelan hacia la sombra por estar
en peligro de extinción. Estas son:
Galán Sin Ventura
Espátula Rosada
Piche Canelo
Garza del Sol
Piche Careto
Pato Candil
Alerta en el Golfo
El
Golfo de Nicoya, ahora está en peligro debido al manejo inadecuado
y la sobreexplotación comercial de sus recursos.
Desde hace 20 años su productividad biológica y la calidad del
agua están disminuyendo. Muchos manglares aledaños al Golfo
están siendo destruidos y sobreexplotados. Esto ha disminuido el tamaño
y la cantidad de especies animales y vegetales que los habitan. Los métodos
inadecuados e ilegales de pesca están provocando la muerte indiscriminada
de muchos peces, moluscos y camarones.
A todo esto se suman los problemas de contaminación, que son más graves conforme pasa el tiempo.
Aterrizando en el Problema
Contaminación y Muerte: Llega la sombra
Nosotros, somos la mayor fuente de contaminación de la zona, especialmente quienes vivimos o trabajamos en el Área Metropolitana, la cuenca baja del Río Tempisque y la ciudad de Puntarenas; es decir, casi 2 millones de personas.
Nuestros desechos industriales, agroindustriales y domésticos viajan por los ríos Tárcoles y Tempisque hasta desembocar en el Océano Pacífico. Luego, las corrientes marinas los depositan en el Golfo.
Esta
contaminación tiene
diferentes orígenes:
Desechos industriales: metales, aceites, combustibles, solventes, pinturas y sustancias químicas.
El níquel, plomo, cromo, zinc, cobre y mercurio, son algunos de los metales vertidos en los ríos que llegan a los humedales. Estos metales acumulados en el organismo en altas cantidades provocan enfermedades, malformaciones o incluso la muerte, tanto en los animales como en las personas.
Desechos agroindustriales: abonos y agroquímicos utilizados en forma descontrolada y en concentraciones mayores a las permitidas en las plantaciones de café y caña de azúcar, que se filtran hasta los ríos.
Desechos domésticos: basura, botellas y bolsas plásticas, aguas jabonosas, desinfectantes, artefactos electrodomésticos en mal estado y aguas negras con poco o sin tratamiento.
Ya es visible el resultado de esta contaminación. El Golfo pierde su encanto, las aguas están llenas de desechos, los peces mueren y con el tiempo las aves podrían desaparecer. Una sombra de enfermedad y muerte cae sobre plantas, animales y personas.
Somos Parte de una Cadena
Los problemas de contaminación que se presentan en el Golfo nos perjudican
a todos: los microorganismos que no podemos ver, las algas, los manglares,
los crustáceos, los peces, las aves acuáticas, la atmósfera...
hasta las personas, que nos alimentamos de otras especies o utilizamos sus
recursos.
En esta cadena lo que le sucede a una especie afecta a las demás. Es un ciclo en donde todos dependemos de todos.
Usted decide dónde termina el vuelo
Con su ayuda llega la luz
¿Existe alguna solución? ¿Qué debemos hacer para que no muera el Golfo de Nicoya?
Desde nuestras casas, empresas e instituciones, podemos organizarnos para proteger nuestro ambiente y aprovecharlo de forma moderada y sostenible, tomando solamente lo necesario sin sobreexplotar la capacidad de sus recursos naturales.
Los gobiernos, municipalidades, empresas e instituciones deben continuar trabajando y apoyando la difusión y concienciación mediante talleres, cursos, campañas de divulgación y otras actividades educativas. Las industrias deben cumplir las normativas ya establecidas, los agricultores utilizar los agroquímicos de una forma controlada y los pescadores las redes y cepos adecuados.
Todos debemos cooperar para evitar la contaminación de los humedales y del agua, que es fuente de vida.
Podemos
empezar con los principios
de las 4 R, es decir:
Reduciendo la cantidad de materiales contaminantes que utilizamos,
Reutilizando aquellos materiales que pueden servir nuevamente como las bolsas,
envases y empaques,
Reciclando los desechos que pueden servir de materia prima como el papel,
cartón , vidrio, aluminio y desechos orgánicos, entre otros;
y depositando en
Rellenos Sanitarios los desechos que no se pudieron tratar con las 3 opciones
anteriores.
Varias
comunidades en nuestro país se han unido para preservar, limpiar y
proteger el medio ambiente y las cuencas de los ríos circundantes,
que darán agua a las generaciones futuras.
Le invitamos a hacer lo mismo uniéndose a un grupo ecológico
o ambientalista, y haga su parte.
Ahora
conoce de esto, debe decidir... y actuar.
Recuerde que, sin importar el lugar donde viva, todos estamos involucrados.
Invite más personas, para que realicen ellos mismos su Vuelo entre
Luz y Sombra.